Muchas mujeres abandonan el ejercicio físico durante el embarazo por miedo a que esta práctica pueda tener efectivos negativos en el feto. Sin embargo, existen algunas actividades físicas que pueden no solo ayudar a mantener el estado físico y la salud de la madre, si no también contribuir a un parto más fácil.
Desde L3 Fisioterapia os explicamos cómo puede ayudar el pilates para embarazadas a sentirnos mejor durante el período de gestación, el parto y el post-parto.
¿Qué es el Pilates?
El Pilates es una disciplina física desarrollada por Joseph Pilates hace algo más de 30 años, la cual entiende que existe una relación cuerpo-mente y cuyos ejercicios están enfocados a potenciar el cuerpo y ejercitar los músculos en su máxima extensión.
¿Qué beneficios presenta el Pilates para embarazadas?
Entre los beneficios generales de la práctica del Pilates encontramos:
- Mayor fuerza y estabilidad corporal.
- Alivio de dolores de espalda.
- Fortalecimiento de la musculatura.
- Esculpe la figura.
- Mejora el grado de satisfacción y bienestar.
- Mejora la coordinación y la postura.
- Incrementa la conciencia corporal.
¿Por qué el Pilates es una buena opción para las embarazadas?
El Pilates puede realizarse durante el embarazo debido a su técnica relajada y de baja intensidad. Además, a parte de los anteriormente mencionados beneficios, el Pilates cuenta con beneficios específicos para mejorar el embarazo y el parto, ya que durante este período el cuerpo de la mujer sufre muchos cambios y molestias:
- Ayuda a trabajar la estabilidad de la pelvis.
- Mejora el suelo pélvico.
- Fortalece la musculatura de la espalda.
- Fortalece los músculos abdominales y pélvicos y ayuda a la colocación del bebé.
- Mejora problemas tales como molestias de espalda y cuello, prolapsos e incontinencia.
- Mejora el control corporal y el equilibrio.
- Reeduca la postura.
- Mejora el control de la respiración.
- Contribuye al autoconocimiento.
- Mejora la relajación y el descanso.
¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de practicar Pilates durante el embarazo?
Aunque el Pilates se trata de un ejercicio de poca intensidad que en general puede realizar cualquier persona sin experiencia previa, en el caso de mujeres gestantes se deberán tener en cuenta algunos puntos antes de practicar, con el objetivo de salvaguardar la salud de la madre y el bebé.
En primer lugar, es importante tener en cuenta que si hemos sido totalmente sedentarias o hemos tenido un nivel muy bajo de ejercicio físico, es mejor que empecemos su práctica al final del primer trimestre, ya que este es el de más riesgo. En el caso de haber practicado Pilates antes, podemos empezar en cualquier momento, siempre con precaución.
Otro punto importante es saber si nuestro ginecólogo o médico nos recomiendan o no la práctica. En casos de embarazo de riesgo, es mejor evitarla.
Finalmente, es de gran importancia que nos apuntemos a clases especiales de Pilates para embarazadas o en el caso de no encontrarlas, asegurarnos que nuestro monitor cuenta con los conocimientos necesarios.
Es recomendable que tenga formación médica, en fisiología y/o anatomía aunque de no disponerlos debemos asegurarnos que conoce cómo trabajar con embarazadas y adaptar los ejercicios a estas.
En L3 Fisioterapia podrás encontrar al mejor equipo para practicar Pilates durante el embarazo y beneficiarte de todos sus efectos. Si necesitas mayor información o tienes alguna duda, puedes contactarnos sin compromiso.